Todos estamos conectados por la Tierra y a ella: ya sea mediante los árboles y las plantas que nos dan el oxígeno que respiramos, las montañas cubiertas de nieve que proporcionan el agua que bebemos o las impresionantes fuerzas geofísicas que dan forma al suelo bajo nuestros pies. La NASA tiene más de 20 satélites que miden la altura de los océanos y las aguas continentales, las nubes y las precipitaciones, el dióxido de carbono y mucho más. Al comprender nuestro mundo cambiante, mejoramos vidas y protegemos nuestro futuro.